Cosas de hermanos

  

 Me llamo Moreno Mengánez Zutánez (y lo digo así, con los apellidos) y ¡TENGO CUATRO! (años). Chillo mucho. Este es mi hermano Dubio (a secas)

 Soy el primero. ¡YO PRIMERO! Entro de primero, salgo de primero y me cuelo todo lo que haga falta. Siempre, en todas partes: en la puerta de casa, en el portal, al subir o bajar del autobús, del coche...Si veo que Dubio va a llegar a algún sitio antes que yo esprinto y lo empujo, porque tengo que ser ¡EL PRIMEROOO!

 Soy patático y todo lo hago bien ¿A QUE SÍ, MAMI? ¿A QUE SÍ? Recojo todo, acabo la leche, pongo los cacharros de la mesa en el fregadero. También barro y limpio con el estropajo, y me calzo yo solo, ¿A QUE SÍ, MAMI? ¿A QUE SÍ, A QUE SÍ, A QUE SÍ????

 Necesito ayuda para ponerme los calcetines, pero con el mando de la tele soy un crack, me pongo lo que quiero: youtube, la tele, HBO...la tecnología no tiene secretos para mi.

 Mamá es una pesada y una cortarrollos, se empeña en que no me salga con la mía no sé porqué, ¡si soy el rey del mambo!. Cuando se pone muy cansina tengo que darle besos para calmarla. No pasa nada, me gusta mucho dar besos y a mamá le doy montones, porque al menos ella no se los limpia luego como hace Dubio.

 Si Dubio coge un juguete voy y se lo quito, porque siempre coge el que iba a pillar yo, y porque yo lo valgo. No falla, da igual que haya mil juguetes por el suelo, siempre quiero el que coge el Dubio. Y si no me dejan chillo mucho y pateo en el suelo, porque mola ver como mamá pierde el oremus pensando en el vecino de abajo. Como Dubio en esas ocasiones chilla más que yo la cosa suele acabar mal pero no importa: si Dubio coge un juguete inmediatamente voy y se lo quito. Ya dije que soy patático así que es lo que hay, haber pedido muerte.  

 Dubio y yo siempre estamos juntos jugando o zurrándonos. A veces las dos cosas a la vez, pero siempre estamos juntos. Siempre. El mundo es hostil y la unión hace la fuerza; aunque soy muy pequeño esto ya lo tengo claro. Además al Dubio solo le zurro yo; hoy mismo, sin ir más lejos, tuve que reñir a mamá porque se cansó de llamar al enano y lo arrastró de un pié hasta el borde de la cama: nonono, así no, ¡ASÍ NO MAMÁ! ¡y tú Dubio, NO TE RÍAS! 

 -Mamá, pide perdón a Dubio. No se tira...del pié. Muy mal mamá, ¡muy mal! - perdón Rubio - dale un besito mamá- Muach- ahora tú Dub...

 -Moreno, ¿podemos seguir con el tema pijama?? -vaaaaale, meeeenga.

 Mi hermano es la persona más importante de mi vida después de mi, claro. Siempre estamos juntos, siempre siempre, SIEMPRE. Si él come, yo tamién, si juega yo tamién, si está frente a la tele yo tamién. Si duerme la siesta yo me lo salto, eso sí...Pero Dubio y yo siempre hacemos todo juntos, somos un pack. 

-Dubio menga, ahora habla tú

 Me...llamo...Dubio. Hablo poco, y despacio. Tengo "tesss" 

Canto mucho. La frase más larga que digo es "en la anja de pipío, ía-ía-ooo". 

 El resto son minifrases de dos palabras, y una de ellas es no. Tiene que serlo, por jones. Si no hay un "no", es que no soy yo: no tero, no me uta, no mami, no voy, o simplemente "no". Siempre digo a todo que no, ahí está la gracia. Y si no sé qué responder o no entiendo lo que me dicen suelto un "nnnno" y santas pascuas. También levanto la barbilla y ladeo la cabeza con los ojos cerrados, muy ofendido. Porque yo lo valgo como el Moreno, y a digno no me gana nadie. Menos cuando mamá me hace pedorretas en la barrigola o cosquillas en el cuello, ahí ya me río a carcajadas y a la mierda el gesto.

 Pero tengo más repertorio: otra fase mía famosa es aaaaaaaaAAAAAA!!!! Así, con efecto crescendo en plan bocina antiaérea de la segunda guerra mundial. Tiene varios significados, entre ellos destacan:

 -Moeno me quitó el juguete.
 -Moeno me empujó para ponerse delante.
 -Moeno me pide perdón y me agarra por el pescuezo para darme un beso baboso
 -Y en general, Moeno está dando por saco. 

 También tengo el grito -¡Moooeeenooo!- con risas por el medio, a veces auténticas carcajadas. Esta siempre significa "ven, que...
  
  -estoy metiendo mil galletas en el vaso de la leche, verás qué risa...
  -estoy pegando los espaguetis a la silla, verás qué risa...
  -estoy jugando a los fantasmas con el fulard de mamá en la cabeza, verás qué risa...
  -estoy jugando con el bote de "arena" al que mamá llama sal, o azúcar, o nescafé, y que quedó abierto sobre la mesa, verás qué risa...
  -y en general que la estoy liando parda solito y así no tiene tanta gracia. Lo malo de esta frase es que el tonito socarrón me delata y casi siempre viene mamá antes que mi hermano. Y ella no se ríe, no sé por qué. 

  Aunque a veces no me oye, o pasa o no sé, sobre todo cuando mi frase es el grito de bocina antiaérea y tengo que recurrir al mamporro puro y duro. ¡Adelante gadgetobrazo! y zurro a mi hermano mayor. Enseguida chillamos los dos de lo lindo y recurrimos al Supremo, o sea a mamá, lo que nunca trae nada bueno. La pobre a veces se lo curra y trata de razonar con nosotros, lo que interpreto como una debilidad por su parte y suelto el gadgetobrazo de nuevo, ¡menudo soy yo!
 -¡mamá! ¡mía Dubio!-chilla el ladrón de juguetes
 -¡Rubio! ¡pídele perdón a Moreno!- ¿pero qué dice esta mujer? ¡si me quitó el inossaurio!! Y sigo intentando pegarle con el ceño fruncido, que da más miedo.
 -Moreno, devuélvele el dinosaurio-¡no!-¡castigados los dos, tú por quitarle el muñeco y tú por pegar! ¡dame el dinosaurio!- ¡noooo, mamaaaaaá!-berreamos los dos a dúo. Y marchamos cada uno para una habitación, castigados. Al ratito nos juntamos otra vez mientras mamá hace que no se entera, y lo mismo nos zoscamos nuevamente a lo loco como nos aliamos para recuperar el inossaurio incautado, sin el cual de pronto ninguno de los dos podemos vivir. Una vez recuperado entonces sí, ya podemos pelearnos otra vez con sentido y razón de ser. Así, sí.
 Aunque en realidad no soy así. Soy de natural tranquilo y pacífico. Es Moeno, que me solivianta. Pero a todo se acostumbra uno y oye, que si un día por lo que sea me deja tranquilo y no me toca los cataplines entonces el que da la tabarra soy yo. Y me subo encima con todo mi cuerpo serrano de solo un kilo menos y mucha guasa - Moeeeno, Moeeeeeeenooo - y le clavo una rodilla o le muerdo un moflete.
 -¡mamaaaaá! Mía Dubioooo! 

Y vuelta a empezar. Porque no sé estar sin mi hermano y siempre,siempre, siempre estamos juntos. Siempre. Pero no soy de dar besos como él, que es un plasta. Yo le doy besitos a mami nada más. A Moeno más bien dejo que me los de él. Y luego me los limpio.   

  

Comentarios

  1. Ai dios! qué rissa! y qué ternura! me imaginé todas las escenas. buenísimo post!

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    1. ¡Muchas gracias Nahir! Tenían cuatro y tres años entonces, ahora tienen siete y seis y siguen igual 😂😂😂

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  2. Ai dios! qué rissa! y qué ternura! me imaginé todas las escenas. buenísimo post!

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