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Mostrando entradas de octubre, 2018

El día que yo fuí feliz

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 Ni violines, ni arco iris, ni una maldita florecita . Solo amor, mucho amor. Sobre todo de amor va la entrada de hoy, aviso y amenazo.  Me siento feliz. E igual que cuando no, escribo post kilométricos y terapéuticos como  este, cuando sí no escribo, no siento la necesidad. Es curioso porque se diría que no le doy importancia, que tengo la suerte de estar casi siempre bien y de que la felicidad sea algo cotidiano que hombre, es así. Pero lo que ocurre en realidad es que, como decían Cristina y Los Subterráneos, normalmente soy feliz solo que no me entero. Mientras que cuando no lo soy mi infelicidad ocupa la primera plana. Y no es justo, ni lógico, ni equitativo. Así que hoy me marco un post sobre lo bien que me va en la vida y por favor, por favor, que no me tenga que arrepentir. Meigas fora y todo eso...no vaya a ser.  Ayer fuí feliz. Y tuve la suerte de ser consciente de ello.  Mi santo llegó de madrugada de trabajar tras unas veinticuatro horas sin dormir, por cortesía

Con todos ustedes ¡el Rubio!

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Yo tenía un nene tranquilo, hermoso, con ojazos, pestañazas y hoyuelos en las mejillas, que se iba criando como podía entre los huecos que dejaba su agotador e intenso hermano mayor...muy poco más mayor, esa es la verdad.    Pero hete aquí que cumplidos los cinco por parte del heredero vemos con sopresa como el benjamín toma protagonismo ¡y a qué niveles! Y sin perder ni un ápice de su personalidad, porque ni para dar por saco se parecen mis rorros. Cabrean por igual, pero con estilos muy diferentes. Mientras el Moreno practica el noble arte del cansinismo retador hasta sacarte de tus casillas (preguntar mil veces lo mismo, pedir mil veces ver otro capítulo de dibujos porfi, porfi, quieroesto-quieroesto-quieroesto-quieroesto...y su opuesto mami estono-estono-estono-estono...así, modo bucle), el Rubio practica la variedad que podríamos denominar "por mis jones" ¿Cómo explicarlo?: con ejemplos, dos:  Mi cumpleaños. Un familiar tiene el detalle hermoso de acordarse y me